Hay cosas que no tienen mucha
explicación, como eso que las paralelas se juntan en el infinito. Nunca nadie
llegó al infinito y volvió para poder contarlo.
Cuando era pibe, pensaba que
los cincuenta y siete estaban tan lejos como el infinito. En aquella época ya
me preguntaban: ¿De qué club sos hincha en el fútbol del interior? La moda era ser
de Talleres, Cipolletti, Chaco For Ever, San Martín de Tucumán, Gimnasia o San
Martín de Mendoza, clubes que participaban de los viejos Nacionales. Pero yo
respondía: de Juventud Unida Universitario. Así completo, sin abreviaturas ni
siglas.
Nunca lo había visto jugar, no
tenía los colores del cielo y de mi corazón; así como era hincha de los
foráneos Atlético Bilbao y del Milan, era hincha de Juventud. Sin explicación,
solo sentimiento.
Hace treinta y dos años visité
por primera vez la Provincia de San Luis y allí conocí el “Mario Sebastián Diez”.
Vacacioné en las sierras, conocí parajes y me enamoré de un lugar: “Potrero de
los Funes”
“Mi lugar en el mundo”, como
di en llamar a ese paraíso que se erigía entre las sierras puntanas, con un
embalse y mucha naturaleza. Jamás imaginé que, ese lugar, tendría un club de fútbol
con los colores más lindos del mundo. El enamoramiento perdura en el tiempo y
Defensores de Potrero, pasó a ser el club del pueblo que amo.
Pero la pasión por el fútbol,
el sentimiento por los colores y por sobre todo la lealtad eterna, mantienen
esa chispa de seguir siendo hincha del club de siempre y si bien alguna vez me
preguntaron: ¿Y si juegan Juventud y Potrero, quién querés que gane? Esa
incómoda respuesta para cualquiera, fue siempre simple para mí: ¿Mirá si van a
jugar Potrero y Juventud?
Uno estaba en Primera B y el
otro en la “A”, encima jugando Torneos Federales. Justo eso de las paralelas y
el infinito. Pero Potrero ascendió y la posibilidad de jugar se hizo cierta. Me
volvieron a preguntar otra vez y la respuesta tuvo que cambiar: ¿Un partido
normal? Que gane el mejor y yo feliz, total el torneo tiene revancha.
¿Y si el partido es
eliminatorio? ¿Mirá si van a jugar Potrero y Juventud un partido eliminatorio?
En la ultima visita a San Luis
concurrí al “Funes” para ver una semifinal impensada años atrás por la Liga,
entre Defensores de Potrero y Juventud Unida Universitario. Llegué temprano y
me ubiqué en la platea para disfrutar de otro partido previo, me sentía
neutral. Minutos antes de comenzar el partido la policía me pidió que me
retirara de la platea, que tenía que ubicarme en una de las populares. Les
expliqué a los agentes la situación y pese a que sonrieron, poco les importó la
situación.
Como dentro de mi estadía en
San Luis, al “Juve” lo iba a ver un par de partidos más y allí vería a mis
amigos auriazules, decidí ir a la popular de Potrero y verlo con los otros amigos.
Es lo bueno de tener amigos en muchos lados. Lo disfruté y no voy a negar que
me tenté en gritar un golazo (¿hace otro tipo de goles este muchacho?) del Papa
Morales, me mantuve en silencio y lo disfruté el doble. El final fue a toda
orquesta.
Me fui del “Funes” solito, con
una sonrisa de oreja a oreja, había pasado una prueba y mi sentimiento sería intacto.
Juventud tenía posibilidades todas las semanas, a Potrero se le complicaría tener
una oportunidad similar de jugar una final. Fue ahí que por mi interior me pasó
una auto pregunta: ¿Y si juegan Juventud y Potrero por una final, que haría? Mi
respuesta fue al aire: ¿Mirá si van a jugar una final justo Potrero y Juventud…?
Anoche me acosté tarde, el
coronavirus y la cuarentena trastocaron mis horarios. En realidad, los horarios
y la vida. Extraño el fútbol. Miro partidos viejos, imágenes de goles, sigo
cosas en las redes y hasta participé de torneos virtuales. Me dormí rápido y
profundo. ¿Y saben que soñé? Soñé en una final virtual entre Juventud Unida
Universitario y Defensores de Potrero de los Funes. ¿Una final virtual te preguntarás?
Y sí, la falta de fútbol nos llevó a esto, pero ahí salió una reflexión: ¿Mirá
si justo van a jugar una final virtual Potrero y Juventud?
Amaneció lindo y fresco acá en
Caballito. Especial para sentarme a mirar el desenlace. Disfrutar de la pasión
por los colores. Del amor por el club y de los otros, los contras. Disfrutar en
momentos en que es difícil hacerlo. Disfrutar del fútbol y de la teoría de las
paralelas y el infinito…
Eduardo J. Quintana
Cuento inédito
ITG: eduardo.quintana961
Twitter: @ejquintana010
Facebook: ejquintana010
Se te complicó Quintana. Pero zafaste como un crack. Abrazo Puntano.
ResponderEliminarJorge